Editorial sesuda de un salteño cincuentón
Al final te das cuenta que uno no es más que un
soldadito en manos de los grandes capitalistas, políticos corruptos y
gobernantes mediocres. Ellos hacen las guerras, plantean las sombrías
estrategias y dejan en banda a los que habían sido aliados antes, provocando
hambre, destrucción y muerte entre el común de la gente, que no tiene padrinos
que los “apañen” ni socios que lo “banquen”. Y ellos siguen como si nada, como
los grandes señores impolutos, que gobiernan y marcan tendencia. ¡Qué pelotudos
que somos! Al final, para comprar un juego de valijas Vuitton con el sueldo que nos paga Macri, o Urtubey. ¡Qué lindo!
Resulta que estos corresponsales de guerra se
ofrecían como voluntarios, armados solamente con una cámara y una credencial de
periodista, y al igual que los soldados de 18 años marchaban a la guerra, a las
zonas más peligrosas, para dejar constancia de las masacres, hambrunas y
bombardeos provocados por estos sesudos políticos y estrategas que lanzaban sus
discursos y planificaban sus genialidades desde cómodas oficinas, con
secretarias atractivas, de carnes firmes y polleras cortas. Los Dickie
Chapelle y Sean Flynn
no eran más que carne de cañón, una pequeña parte más den gran engranaje de la
vida que manejaban los de arriba y no rendían cuenta a nadie.
Uno de los sospechados de estas “matufias” fue el
gran William Randolph Hearst, magnate
de los medios, de quien se decía que había estimulado la guerra entre España y EEUU para obtener fotos y documentos espectaculares para vender más
en sus medios. Y no sería de extrañar que los dueños de otros conglomerados e
industrias también hayan estado detrás de conflictos y rispideces entre países,
para armarlos y venderles, a ambos bandos, por supuesto, como corresponde a
cualquier capitalista que se precie de tal. Y tampoco sería extraño que estos
países seudo socialistas, “libres de la corrupción capitalista”, también hayan
hecho de las suyas para provocar guerras. Señores, ya somos grandes y hemos
leído bastante de estos popes del comunismo y socialismo como para no sospechar
de sus buenas intenciones, en el Congo, Bolivia o Afganistán.
Demás está decir que los únicos culpables de estas
situaciones somos nosotros mismos, los comunes, humildes y sin voces, que
apoyamos los sueños de grandeza de estos trasnochados (con nuestro voto). O
miramos para otra parte cuando vemos que están haciendo “macanas” y les
festejamos los chistes como si se trataran de las inocentes bromas de un
pequeñín sin responsabilidad ninguna ni atisbo de un sentido de culpa. ¿De qué
otra forma se entendería el avance al poder
del mismo Hitler y sus esbirros, que durante años demostraron sus
prejuicios, histeria y violencia y nadie se alertó con las peligrosas
consecuencias de tener semejante personaje manejando los destinos de millones
de personas?
¿O como juzgamos que durante años y años los
seguidores de Cristina Kirchner realizaron sus experimentos con la Argentina,
llevándola al quebranto y que sigan en carrera política, como si fueran los
salvadores de la patria, al lado de un San Martín y un Belgrano? ¿O que
Mauricio Macri te suba los impuestos y servicios un mil por ciento y todavía
tenga el tupé de pedir que lo vuelvas a votar por otros 4 años más? Hello!! You
think I´m stupid?
Es como dicen, nadie sabe para quién trabaja y lo
más seguro es que se trabaje en negro, no se tenga derechos y nadie que lo
defienda. Como cuando trabajábamos en los institutos privados de inglés:
cobrábamos al día, pero no estábamos en blanco, no teníamos una puta obra
social ni nos hacían los aportes a la jubilación. Lindo, ¿no?
¿Y qué me dicen los trabajadores de vialidad de
Salta que se quejan porque están contratados, sin ninguna obra social ni
aportes a la jubilación, y nadie les da pelota? ¡El mismo gobierno explotando a
la gente! Acá, por estos lares, se puede ver cualquier cosa, de todo. Un loco
de director de un loquero y un preso gobernando una cárcel.
También está en nosotros el dejar de ser manejados
como una veleta. Tenemos las armas y debemos usarlas. No armas de destrucción
masiva sino elementos que lleven conocimiento para tomar decisiones acertadas.
Somos seres humanos no monos a los que se puede llevar atado del “cogote”. Es
simple: estudiá, prepárate para conocer y discernir lo que te conviene y sacále
el dedo del medio al que viene a ofrecerte espejitos. Ya no queremos ser más
soldaditos manejados por los grandes señores del capital, de la política, de
los sindicatos, de la iglesia. ¡Que se vayan al carajo!
Mejor dejar que se agarren a las piñas ellos, los gobernantes
de turno, los de los grandes discursos, los constructores de la nación, los
patriotas trasnochados de lustrados calzados y carteras “Vuitton”. Que sea Hitler
el que salga en pantaloncillos al ring, a pelear por sus ideales. Que sea él el
que se calce los guantes y se “cague a trompadas” con el candidato del pueblo,
el gordo Churchill. Que sean ellos los que eludan los golpes y traten de lanzar
jabs a la quijada. Alguna vez que sean los de arriba los que la suden.
Equipaje Vuitton para estar a tono con las carteras de Cristina |
Para
saber
Vuitton
fue fundada por Louis Vuitton en 1854
en la Rue Neuve des Capucines en
Paris, Francia. La compañía participó de la Universal
Exhibition en Paris de1867. Georges Vuitton comenzó una campaña para
hacer de la firma una compañía internacional. En 1893 participó
de la Chicago World's Fair. A partir
de 1913 varias tiendas abrieron en New
York, Bombay, Washington, London, Alexandria, y Buenos Aires. Durante la
Segunda Guerra Mundial Vuitton
colaboró con los Nazis durante la
ocupación francesa. Las carteras Vuitton,
icónicas, son producidas cada año y reservadas a través de sus tiendas.
Artículos
relacionados
Hereward Carrington y Harry Houdini lucharon contra
el fraude y la especulación de cientos de “chantas” que solo querían lucrar con
el desconocimiento de la gente… Espíritus
chocarreros
¿Acaso tuviste clemencia de los policías, soldados,
personas comunes, que murieron a causa de los tiros, y bombas que pusiste, sin
tener nada que ver, ni participar en ninguna confabulación?... Ni
lo uno ni lo otro
No comments:
Post a Comment