Al leer la historia queda la sensación que Estados Unidos planificó la invasión a Cuba de mala gana, traicionando a los
contra-revolucionarios cuando vio que el mundo se oponía a sus deseos. Más
abajo participantes de la invasión de la Bahía
de Cochinos, de ambos bandos, recuerdan el histórico momento.
Kennedy decidió no proporcionar más cobertura aérea…
Cuba se acercó más a la Unión Soviética, llevando al
mundo al borde de la guerra nuclear…
Lamento que el gobierno y los norteamericanos no
vean que esto fue una revolución social. Sentimos que estábamos haciendo lo
correcto con Fidel…
La invasión de la Bahía de Cochinos fue una invasión militar fallida a Cuba emprendida por el grupo rebelde
patrocinado por la Agencia Central de
Inteligencia (CIA) Brigada 2506
el 17 de abril de 1961.
Lanzada desde Guatemala
y Nicaragua, la fuerza invasora fue
derrotada en tres días por las Fuerzas
Armadas Revolucionarias Cubanas, bajo el mando directo de Castro.
En marzo de 1960
el presidente de los Estados Unidos, Dwight D. Eisenhower asignó $ 13.1
millones a la CIA para planificar el
derrocamiento de Castro. La CIA procedió a organizar la operación
con la ayuda de varias fuerzas contrarrevolucionarias cubanas, entrenando a la Brigada 2506 en Guatemala. El sucesor de Eisenhower,
John F. Kennedy, aprobó el plan de
invasión final el 4 de abril de 1961.
Comandos cubanos entrenando con la CIA |
Más de 1.400 paramilitares se reunieron en Guatemala antes de partir hacia Cuba en barco el 13 de abril de 1961. Dos días después, el 15 de abril, ocho bombarderos B-26 atacaron los
aeródromos cubanos y luego regresaron a los Estados
Unidos. En la noche del 16 de abril, la invasión principal comenzó en Playa Girón en la Bahía de Cochinos. Inicialmente abrumó a una milicia revolucionaria
local. La contraofensiva del ejército cubano fue dirigida por José Ramón Fernández antes de que Castro decidiera tomar el control
personal de la operación. A medida que la participación de los Estados Unidos se hizo evidente para el
mundo, y con la iniciativa contra la invasión, Kennedy decidió no proporcionar más cobertura aérea. El
20 de abril, los invasores se rindieron después de solo tres días, y la mayoría
fue interrogada públicamente y encarcelada en las cárceles cubanas.
La invasión fallida ayudó a fortalecer la posición
del liderazgo de Castro. También
reforzó las relaciones entre Cuba y
la Unión Soviética. El
fortalecimiento de las relaciones soviético-cubanas eventualmente condujo a los
eventos de la crisis de
los misiles cubanos de 1962.
Fidel Castro: Remembering the Bay of Pigs
Ha pasado mucho tiempo desde que Agustín Pérez hizo
este viaje a esta parte de Cuba, unas pocas horas al sudoeste de La Habana. ¿Cuándo
fue la última vez que estuvo aquí? Abril de 1961, cuando Agustín era un
revolucionario cubano de 17 años.
—Pertenecía al batallón 115 de la milicia nacional.
Vine a luchar contra los mercenarios que vinieron a atacar al país.
Hace 55 años él vio el incesante cañoneo de las
milicias cubanas… La batalla se hizo conocida como el lugar cercano: Bay of Pigs.
Fue un momento crucial en las relaciones cubano-norteamericanas,
con la intención de derrotar al líder revolucionario Fidel Castro por los nacionalistas cubanos. Habían sido entrenados
y financiados por la CIA. Fracasaron
miserablemente en pocos días. Castro
capturó a cientos. Estados Unidos fue
humillado. Cuba se acercó más a la Unión Soviética, llevando al mundo al
borde de la guerra nuclear y a un embargo norteamericano que recién ahora está
empezando a aflojar.
Agustín recuerda la noche de la invasión como si
fuera ayer. Castro se trasladó en su
carro sabiendo que sus soldados habían rechazado a los invasores… A través del
bosque Agustín puede ver a otro hombre, Antonio, que también recuerda esa
noche.
—La invasión fue al frente de mi casa.
En toda la región se ven restos del ataque… Este es
el museo de Cuba, que testimonia la
importancia de ese día para los cubanos. Y aquí una larga lista de nombres
familiares a Agustín, que pelearon con él por Castro.
—Fue una guerra ideológica y la hemos ganado
nosotros. Al final nosotros resistimos.
A 150 kms. de allí una perspectiva diferente. En Little Habana un grupo que escapó al régimen
de Castro también comparte sus
memorias.
En este museo dos hombres que formaron parte de ese
grupo entrenado por la CIA.
—Me enteré que se estaban entrenando para la
invasión de la Bahía de Cochinos. Ahí
fue cuando me uní al campamento Kennedy.
—Nunca me consideré un agente de la CIA. El objetivo era sacar al gobierno y
traer un gobierno democrático a Cuba.
Castro
se enteró de la invasión, sus tropas superaban a las de los invasores y los
locales eligieron ponerse del lado de Castro.
Fue un desastre.
— ¿Qué le diría a Castro?
—Mataría al h… de p… Lo siento, pero es lo que
sentimos todos.
En la isla Agustín se encuentra con otros que también
estuvieron esa noche, Felina y Manuel. Hasta ahora fervientes seguidores de Castro.
—Nosotros no pagamos por remedios ni educación.
Nunca va a haber una revolución como esta…
—La actitud que tuvo EEUU fue arrogante, tratando de imponer su estilo de vida al mundo.
Eso no es correcto. Si se hubieran manejado de otra forma hubiera sido mucho
mejor para ellos y nosotros.
En Miami
los malos sentimientos siguen. Piensan que Obama
está equivocado en acercarse a Cuba
sin saber si se va a terminar con la represión o si se van a mejorar los
derechos humanos.
—La visita de Obama
es una cachetada para todos aquellos que creen en la democracia. Es otro acto
de traición.
—Está prolongando el control del gobierno sobre los
cubanos.
Agustín cree que tendría que haber vuelto antes y es
optimista por el futuro. Apoya la visita de Obama
y el relajamiento de la presión.
—Lamento que el gobierno y los norteamericanos no
vean que esto fue una revolución social. Sentimos que estábamos haciendo lo
correcto con Fidel. Da la bienvenida
a inversiones extranjeras. Va a ayudar a la economía. Va a ser mejor pero en
términos cubanos…
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